Olivier Pavón y Mario Hernández | Nacional / Viernes 6 de Mayo, 2005
Por lo menos siete personas murieron y cuatro mil 500 resultaron damnificadas por la intensa tormenta con granizo que azotó la ciudad de Oaxaca y 18 municipios del estado la noche del miércoles, informó Protección Civil del estado.
Asimismo, el presidente municipal de la capital oaxaqueña, el priista Jesús Ángel Díaz Ortega, declaró la tercera fase de contingencia en al menos unos 20 puntos críticos de la ciudad, donde el agua y el hielo se elevaron hasta 70 centímetros.
Entre los fallecidos se encuentran tres menores de edad y la madre de éstas, María de la Paz Venegas, así como el chofer Rogelio Cosme, quienes en una camioneta intentaron cruzar un arroyo a la altura de San Pedro Guegorecxe, a 30 kilómetros de la capital, informó en entrevista el director de Protección Civil, Héctor González.
Agregó que las precipitaciones, acompañadas de granizo y fuertes vientos, empezaron cerca de las 20:00 horas y terminaron cerca de las 23:00 horas.
La tromba también dejó un saldo de dos personas muertas en la capital: una por un paro cardiaco y otra más electrocutada a causa de una descarga eléctrica.
En algunas zonas bajas de la capital, donde el agua alcanzó el metro de altura, intervino el Ejército para desalojar a las familias afectadas, informó el secretario general de Gobierno del estado, Jorge Franco Vargas.
El funcionario declaró que los damnificados fueron trasladados a por lo menos cuatro albergues provisionales, donde también fue montado un centro de acopio.
En otras zonas de la ciudad el granizo alcanzó unos 40 centímetros de altura, además de provocar serios problemas viales y cortes de energía, dijo Héctor González, al agregar que la contingencia fue atendida de inmediato por el gobierno del estado.
Comentó que de inmediato se abrieron albergues —los cuales ya fueron cerrados en las primeras horas de ayer— en donde se alojaron unas 600 personas. Uno de ellos, fue abierto en el municipio de San Antonio de la Cal, a unos 20 kilómetros de la capital.
No obstante, indicó que en las primeras horas de ayer las personas ya empezaron a regresar a sus hogares. Agregó que a los afectados se les proporcionó cobijas, colchonetas y láminas, mientras que a los familiares de los fallecidos se les ayudó con el ataúd y alimentos.
El titular de la Unidad Estatal de Protección Civil declaró que al menos 500 brigadistas del Cuerpo de Bomberos, de la Policía Preventiva, así como del Ejército participaron en las labores de rescate.
En total, agregó, 30 colonias y 12 municipios resultaron afectados. Informó que se prevén lluvias para el fin de semana, aunque no con la misma intensidad.
Por su parte, Alberto Hernández Unzón, subgerente del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), señaló que “es inusual” que se den el tipo de tormentas como la que azotó la capital.
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